agosto 2, 2022

La mejor edad para enseñar a los niños otro idioma

Por Asia Central

¿Espera que su hijo tenga acceso a ideas y perspectivas de otro idioma? ¿Sueña con que su hijo cambie de idioma sin esfuerzo? ¿Sueña con visitar Barcelona con una hija que sepa negociar como un local?

Muy bien, entonces, ¿cuándo debería animarles a empezar a aprender un idioma extranjero? ¿Es tan pronto como puedan hablar, o debería esperar hasta que dominen el inglés?

Pues bien, todos los investigadores coinciden en que cuanto antes empiece un niño a aprender hablar español, mejor, por más de una razón. Algunos investigadores afirman que la capacidad de adquisición de una segunda lengua alcanza su punto álgido a los 6 ó 7 años o antes. Otros afirman que esta ventana se extiende hasta la pubertad.

Pero todos coinciden en que es mucho más difícil que un niño aprenda un nuevo idioma después de la pubertad. A continuación, encontrará todos los puntos de vista predominantes y sus argumentos de apoyo para que le sirvan de referencia y le ayuden a tomar la decisión más informada posible.

¿Por qué empezar a los 3 ó 4 años?

Si hace unos años hicieras esta pregunta, todo el mundo te miraría como si fueras un extraterrestre. Era inconcebible que niños de tan sólo tres años fueran capaces de aprender una segunda lengua, dado que aún no dominan su lengua materna.

Hoy en día, sin embargo, los resultados de las investigaciones indican algo totalmente distinto. Estudios de la Universidad de Harvard confirman que la creatividad, la capacidad de pensamiento crítico y la flexibilidad de la mente aumentan considerablemente si los niños aprenden una segunda lengua a una edad más temprana. Se cree que los años preescolares, especialmente los tres primeros años de vida, son un periodo vital en la vida del niño. Es cuando se sientan las bases de las actitudes, el pensamiento y el aprendizaje, entre otros.

Se fomenta mucho el uso de esa capacidad natural porque aprender una segunda lengua es tan fácil como aprender la primera. Puede parecer una gran carga, pero, de hecho, no lo es. El cerebro humano es algo maravilloso. Desde que nacemos, aprendemos por seis métodos principales:

  • La vista
  • El gusto
  • El olfato
  • El sonido
  • Tacto

A partir de la información que obtenemos en nuestros primeros años, todo lo que hemos aprendido crece más tarde en la vida. Las investigaciones han demostrado que el 50% de nuestra capacidad de aprendizaje se desarrolla a los 4 años y otro 30% a los 8 años. Por eso se anima a los niños de tres años a aprender una segunda lengua. Sin embargo, esto no significa que el 80% de los conocimientos o la inteligencia se formen antes de los 8 años. Simplemente significa que los niños desarrollan sus principales vías de aprendizaje durante sus primeros años de vida.

Los estudios han demostrado que cuanto más joven es el alumno, más puede adoptar pronunciaciones y recrear nuevos sonidos. Además, los niños de alrededor de tres o cuatro años pueden aprender a través del juego porque todavía no están abrumados por los datos y la información que hay que almacenar y evaluar, algo que ocurre a medida que crecemos.

Los niños bilingües que aprenden un segundo idioma desde una edad temprana hablan como un nativo en ambos

Después de la adolescencia, el cerebro cambia y hace que sea muy difícil para un adulto aprender una lengua extranjera. Esto no significa que no puedan aprenderlo; sólo que no lo harán de la misma manera que un niño, porque los mecanismos que ayudan al aprendizaje de idiomas no son los mismos que a los 2-5 años.

Los niños aprenden mejor una segunda lengua si la adquieren en sus comunidades o familias, en lugar de en el aula.

Y, además de la fluidez añadida, los niños bilingües no sólo hablan dos idiomas antes que sus compañeros de una sola lengua, sino que también son mejores en la realización de tareas que requieren un cambio de atención. Además, las investigaciones han demostrado que los niños que primero dominan su lengua materna y luego aprenden una segunda lengua llegan a dominar la lengua extranjera, pero nunca consiguen alcanzar el nivel de excelencia de los que aprenden ambas lenguas de una sola vez.

¿Qué pasa con los niños de familias bilingües?

Todo depende de la situación de la familia. Por ejemplo, un niño de madre británica y padre italiano que vive en el Reino Unido puede empezar a aprender los dos idiomas nada más nacer.

En cambio, un niño en edad escolar de, por ejemplo, Alemana, que emigra a USA se ve obligado a aprender la nueva lengua -el inglés- lo antes posible. Esto puede llevar varios años, dependiendo de la edad del niño, para alcanzar el nivel de un hablante nativo de inglés. No será fácil ni rápido, por lo que se aconseja que los padres, en estos casos, no tengan grandes expectativas (poco realistas) en torno al aprendizaje de la segunda lengua.